Nutrición familiar

Volvamos a la base

LIC. JOSEFINA MARCENARO

Licenciada en Nutrición

jmarcenaro@hotmail.com

Organizarse es fundamental

En tiempos difíciles, de incertidumbre y donde todo sale mucho, sugiero no desesperarse y volver a “las bases”. Es verdad que hoy por hoy todo se puede encontrar hecho, listo para llevar o directamente poner al horno, pero todo eso hace que alimentarnos sea más caro. Aquí es donde se cuestiona la falta de tiempo, la falta de plata, y la no mencionada: falta de organización.

En estos días, y hace ya unos años, el tema de comprar productos reducidos en grasas, sodio, etc., o “más naturales” es un tema en cuestión ya que son significativamente más caros y la plata no alcanza igual. Es por eso que he trabajado mucho con mis pacientes el tema de “volver a cocinar”, organizarse y elaborar.

Rever las porciones ya que muchas veces se paga 4 veces más un light y se lo come en la misma proporción (¡4 veces más porque total es light!).  Volver al litro de leche en lugar de postres terminados y envasados en góndolas, comprar el kilo de harina y no los bollos freezados o tostadas envasadas. Retomar la idea de las frutas y verduras de estación en lugar de frutos rojos o frutas exóticas porque leyeron en internet alguna “bondad mágica”. En pocas palabras cocinar un poco más para que la cosa rinda.

Pongamos lo dicho en ejemplo, ¿por qué insisto en volver al litro de leche?

  • Un litro de leche se puede encontrar en el mercado al momento de escribir esta nota en unos $55-$60. Si a eso le sumamos una caja de algún postre instantáneo (flan), que está alrededor de $30 nos vamos a $88 promedio, o sea $11 la porción (ya que rinde 8 porciones) y esto es menos de la mitad de lo que cuesta un flancito en su pote individual. Pero también a ese litro de leche lo ponemos transformar en un flan con 7 huevos y una taza de azúcar y así es aún más económico.
  • Con la leche también podemos hacer chocolate caliente o licuados con fruta de estación para desayunos y / o meriendas o un arroz con leche como el de la abuela, muy rico y con poco costo.

Otro ejemplo es un kilo de harina:

  • 1kilo de harina, un poco de polvo de hornear, sal, pizca de azúcar y levadura sale aproximadamente un kilo de pan. ¡Rico, sano y natural! Se puede variar la versión con leche, harina integral, agregado de semillas. Fresco o tostado. Se puede freezar.
  • También se puede transformar esa harina con un poco de leche, huevo y manteca en un exquisito bizcochuelo que luego será bay biscuit si es que sobra.
  • Masa de tarta u empanadas, tapas para tacos…… miles de versiones con diferentes agregados.

Comprar la carne y luego empanar en casa en el caso de las milanesas, hacer uno las hamburguesas, etc.

La organización es la base para que esto funcione. Si uno se organiza para las comidas y también para las compras, todo es más rendidor y fácil.

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