Producir XXI, septiembre 2020

Beneficios de la Vacuna J5 contra coliformes

Dr. Eial Izak

Consultor en Mastitis y Calidad de Leche

+54 9 11 5133-9336

La foto muestra una vaca con Mastitis severa por coliformes. El problema tiene una muy buena vía de prevención con la vacuna J5.

 

Los casos de mastitis clínica severas por coliformes (Escherichia coli y Klebsiella spp.), se presentan principalmente al inicio de la lactancia y en rodeos que han controlado los patógenos contagiosos.

Estas mastitis son costosas, no siempre resueltas, llegando a la muerte del animal. En vacas un primer caso de Klebsiella spp. tiene 3,7 veces más riesgo de mortalidad y 3 veces para Escherichia coli. La mastitis severa tuvo el triple de probabilidad de descarte, comparada con las mastitis leves y moderadas. Las vacas con mastitis severas reducen en un 50% la probabilidad de preñez al primer servicio comparadas con las vacas sanas.

Es mejor prevenir, y rinde $

La prevención de la enfermedad es considerada la mejor opción y puede consistir en reducir la exposición de la punta del pezón a coliformes del medio ambiente y el incremento del sistema de defensas a la infección. La vacunación es una opción preventiva viable. La severidad de la inflamación y la ocurrencia de mastitis clínica severa por coliformes, puede reducirse por el uso de la vacuna J5. Los beneficios de la misma incluyen una reducción de la incidencia del 80% durante los 3 primeros meses de lactancia, reducción de la pérdida en producción de leche, mortalidad y descarte.

Vacuna J5 en vacas

El Dr Pol y colaboradores (2008), realizaron un estudio en un tambo de Argentina con 1.200 vacas en ordeño con una vacuna de Rotavirus bovino serotipos 6 y 10 y Escherichia coli J5 (Rotatec J5, Biogénesis Bagó). El riesgo relativo de adquirir un caso clínico fue 1,44 veces mayor en el grupo control negativo (sin vacunación) comparado con el grupo vacunado. El grupo control tuvo un riesgo 1,86 veces mayor que el vacunado para manifestar mastitis clínicas severas por coliformes. El riesgo relativo de que un animal muriera o fuera descartado fue 7,83 veces mayor para el grupo control, comparado con el grupo vacunado. La tasa de incidencia de mortalidad y descarte en el grupo control fue del 87,2%, debido a la falta de vacunación. En el cuadro 1, se resumen los resultados obtenidos.

Molina y colaboradores (2013), evaluaron la vacuna Rotatec J5 en vacas. Las vacas vacunadas redujeron la prevalencia de infecciones intramamarias (IIM) por Escherichia coli, comparando el secado con el post-parto en un 87,52% vs. un 39,98% para el grupo control no vacunado. La vacuna J5 redujo la ocurrencia de mastitis clínica por Escherichia coli en el post-parto. El 66,60% de IIM por este patógeno se convirtieron en clínicas en el grupo control no vacunado, en comparación a ningún animal vacunado. La vacuna J5 redujo la ocurrencia de mastitis clínica por Escherichia coli en los primeros 100 días de lactancia en un 45,14%, comparada con el grupo control no vacunado. El 7% de las vacas vacunadas presentaron mastitis severas por Escherichia coli vs. ninguna del grupo vacunado. En los primeros 100 días de lactancia las vacas vacunadas incrementaron un 7,20% la producción de leche, comparadas con el grupo control.       

Vacuna J5 en vaquillonas

Gentilini y colaboradores (2012), evaluaron la Vacuna Rotatec J5 en vaquillonas. Se administraron 3 dosis de la vacuna: la primera a los 60 días pre-parto, la segunda a los 30 días pre-parto y la tercera en la primera semana post-parto. La vacuna J5 redujo la ocurrencia de mastitis clínica por Escherichia coli en el post-parto. El 100% de IIM por este patógeno se convirtieron en clínicas en el grupo control no vacunado, en comparación a ningún animal vacunado. La vacuna J5 fue eficaz en reducir la ocurrencia de mastitis clínica en los primeros 100 días de lactancia. Otro beneficio fue el incremento de la producción de leche en las vaquillonas vacunadas, comparadas con el grupo control sin tratar. En los primeros 100 días de lactancia las vaquillonas vacunadas produjeron 3,08 litros/día más (incremento del 17,44%), comparadas con el grupo control. En el cuadro 2, se resumen los resultados obtenidos.

Conclusiones

La intensificación de los sistemas de producción de leche y factores ambientales como barro y lluvia, favorecen la aparición de mastitis coliformes. La vacuna J5 es eficaz contra mastitis por Escherichia coli y Klebsiella spp. Sigue siendo la más probada y estudiada en mastitis. Los beneficios incluyen la reducción de la incidencia, severidad y duración de los casos clínicos, días en hospital, impacto de mastitis y fertilidad, abortos, muertes, descartes e incremento de producción de leche. La vacuna Rotatec J5 presenta la ventaja de tener una doble acción: mastitis coliformes y diarrea neonatal de las terneras en la guachera. El estudio de Argentina destaca que, salvar una vaca de cada 100 en lactancia de contraer un caso severo de mastitis clínica por coliformes justifica económicamente la administración de la vacuna J5.  

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