Producir XXI, septiembre 2023

Novedad tecnológica: Conservar Heno, pero… de MAS ALTA CALIDAD.

Ing.Agr. Guillermo Piñeiro

Asesor Técnico BioGrow Agentina

Guillermo.pineiro@biogrow.com.ar

Ing. Agr. Gastón Urrets Zavalía

INTA Manfredi

urretszavalia.gaston@inta.gob.ar

El mercado de reservas forrajeras está en constate crecimiento y evolución y particularmente en el segmento del HENO. Esto es por la evolución a esquemas de mayor confinamiento en tambos, y por el desarrollo del mercado de exportación, poniendo énfasis en el mercado de alfalfa.

Ambos caminos tienen algo en común: exigen más calidad

Coinciden en la exigencia de los productores/usuarios, ya sean del mercado local o del exterior, de recibir Heno de Alta Calidad. Este contexto nos obliga (afortunadamente) a trabajar en estrategias de cosecha de forrajes, buscando alcanzar una alta calidad nutricional.

Para el caso de heno, en primer lugar, debemos prestar atención al Momento Fenológico, que para el caso de alfalfa es botón floral o inicio de floración. En este estadio tendremos la mejor relación de cantidad/calidad, pasado dicho estadio, tendremos más volumen, pero la calidad decrecerá drásticamente.

Considerar el clima es Clave

El Clima (conformado a su vez por varios aspectos) es fundamental, ya que para cortar y pre-orear un cultivo debemos tener un lapso de tiempo donde los siguientes factores: Temperatura, Humedad Ambiente y Humedad del Suelo, definirán la velocidad de pre-oreo que necesitaremos para poder henificar correctamente.

Un aspecto muy importante será el tiempo trascurrido entre el corte (con aproximadamente 22/24% de materia seca) y el momento hasta llegar al 50% de materia seca. Cuanto más rápido se de este paso “de 22% a 50%” mayor será la calidad del henificado. La importancia radica en que en ese nivel de 50% de MS se detienen los procesos de degradación de los nutrientes presentes en el cultivo.

Innovación tecnológica

En estos últimos años se desarrolló una tecnología de producto denominada “Acelerador Biológico de Secado de Forrajes” (Bioheno – introducido en Argentina por Biogrow) que fue evaluado con un ensayo en INTA Manfredi y que en varias experiencias de campo está dando excelentes respuestas a esta problemática de secar pasto en el lapso más breve posible, ampliando la ventana de trabajo, con una mayor eficiencia en el proceso de producción y menor pérdida de hojas, logrando henos de mayor calidad.

Qué es Bioheno

Es un inoculante compuesto por un conjunto de bacterias del género Amyloliquefaciens que genera una plasmólisis celular, haciendo que el agua que está en el cultivo se libere más rápidamente, permitiendo el secado del cultivo. En el Gráfico 1 resulta importante ver cómo el cultivo inoculado llega en 22 hs al 50% de MS respecto del cultivo no tratado, que tarda 32 horas…10 horas fun-da-men-ta-les en el trabajo.

Además, este complejo de bacterias genera Subtilisina, una enzima que actúa como fungistático natural, inhibiendo el desarrollo de hongos. Esta acción permite henificar con hasta un 25% de humedad en rollos (sin tratamiento los rollos solo pueden confeccionarse con menos del 20 % de humedad). Este hecho se expresa y comprueba en la temperatura de los rollos (ver Gráfico 2), en donde el testigo no tratado llega a temperaturas mayores a 46°, tomando el clásico color marrón o atabacado y generando pérdidas irreversibles.  Obviamente el heno de mayor calidad brindará un mayor aprovechamiento por parte de los animales.

Bioheno se aplica inmediatamente antes de cortar, ya sea con equipos montados en la segadora o con equipos de pulverización. En los dos gráficos, Testigo (T0): sin aplicación de aditivo biológico. Tratamiento 1 (T1): con aditivo biológico Biogrow en dosis de 25 gr/t MV Tratamiento 2 (T2): con aditivo biológico Biogrow en dosis de 35 gr/t MV