Ganancias de peso cercanas a los 800 gr​/dia

Engorde pastoril con sorgos BMR o nervadura marrón como forraje fresco

Dr.C. (Ing. Agr. M.Sc. PhD.) Aníbal Fernández Mayer

EEA INTA Bordenave

afmayer56@yahoo.com.ar

fernandez.anibal@inta.gob.ar

Los sorgos tradicionales permiten sostener altas cargas

Durante la época estival, uno de los cultivos más utilizados en una amplia región de la Argentina y Uruguay es el sorgo híbrido forrajero (Sorghum sp), tipo Sudan, tanto en lecherías como en los campos de cría y ceba (Berti 2010). Este cultivo se destaca por tener altas producciones de forraje por hectárea (8.000 a 15.000 kg/MS/ha) que permite sostener una elevada carga animal (3 a 6 animales/ha) durante 2 a 4 meses del verano, dependiendo de la zona. Sin embargo, a pesar de la alta producción de forraje las ganancias de peso que se pueden alcanzar son bajas (400 a 600 gr/día). Este comportamiento está vinculado con los desbalances nutricionales (digestibilidad 50-60%; proteína bruta de 8 a 14%, FDN 60-75% y lignina 4 a 8%) que tienen estos sorgos tradicionales a lo largo de su ciclo productivo (Giorda y Cordes 2009 y Murray et al. 2010).

Mientras que se desconoce si la mayor digestibilidad de los sorgos BMR, como forraje fresco, genera una mayor ganancia de peso y terminación de los animales sin el agregado de granos de cereales u otro tipo de aditivos (Murray et al. 2010 y Berti 2010).

 

Materiales y métodos

Este trabajo experimental se realizó en la localidad de Bonifacio (partido de Guaminí, Buenos Aires). El ensayo se repitió dos años seguidos. En el año 1 el ensayo se extendió 99 días, desde el 22 de diciembre al 31 de marzo. En el año 2, el período de ensayo fue de 69 días, desde el 6 de enero al 16 de marzo. Las lluvias ocurridas en ambos años evaluados se describen en el Gráfico Nº 1.

En el año 1, el 11 de noviembre se sembraron 31 ha de sorgo BMR forrajero azucarado y en el año 2, el 1º de noviembre se sembraron 76 ha sorgo BMR forrajero fotosensible. En ambos casos, la siembra fue realizada con una sembradora de siembra directa a una densidad de 8kg/ha.

Los fertilizantes fosforados usados fueron 60 kg/ha aplicados a la siembra de una mezcla (75% superfosfato + 25% de sulfato de calcio) (Año 1) y 30 kg/ha de fosfato mono amónico (Año 2). Mientras que los nitrogenados fueron 115 kg/ha de solmix aplicado el 19 de noviembre en el año 1 y en el año 2, 50 kg/ha de urea aplicadas el 5 de diciembre.

Para controlar las malezas se usaron 2 lt/ha de atrazina + 1,5 lt/ha de herbadox (a la siembra en ambas etapas). El primer pastoreo en todos los casos fue cuando los sorgos tenían entre 0.45 a 0.60 metros de altura, buscando la mayor calidad y aprovechamiento posible.

En el año 1 se utilizaron 140 novillos Angus de 318 ±12,89 kg/cabeza de PV al inicio del trabajo. En el año 2, fueron 340 novillos de la misma raza, con un peso vivo inicial de 347,25 ±14.56 kg/cabeza PV. Mientras que el peso a la finalización del ensayo fue 396,0 ±18.4 y 402,5 ±17.55 kg. PV/animal, respectivamente La carga animal resultante medida en animales por hectárea en ambas años fue similar 4,5 animales/ha.

Sin embargo, la carga medida en kg/ha fue diferente 1,606 y 1,687 kg PV/ha respectivamente, debido a que en el año 2 se utilizaron animales más pesados. El forraje asignado por animal fue de 4,54 y 4,64 kg de Materia Seca (MS) cada 100 kg PV/día, respectivamente. En ningún momento se utilizó suplementación correctiva, ni energética ni proteica. La unidad experimental fue el animal con 20 repeticiones. Para encontrar el modelo de mejor ajuste a la variable Peso Vivo, en ambas etapas, se probaron modelos lineales y no lineales.

Los costos directos (U$S/ha) de implantación de los sorgos fueron de 156 U$S/ha. En el ensayo no se realizó ningún tratamiento sanitario.

Resultados

En el Cuadro Nº 1 se describen los valores medios de la calidad de los sorgos BRM en ambas etapas.

Gráfico Nº 1: Precipitaciones caídas durante el ensayo (en mm)

Los sorgos BMR permitieron buena eficiencia de conversión y ganancia de peso producciones de forraje fueron de 6.000 y 5.800 kg MS/ha, respectivamente. Los consumos de MS de ambas años, fueron 9,80 y 10,40 kg MS/cabeza/día y 2,75 y 2,80% PV, respectivamente y no se diferenció entre etapas.

En los Cuadro 2 y 3 se presentan el balance energético-proteico de la dieta, media, y la evolución de los pesos vivos obtenido en ambas etapas, respectivamente. Se puede destacar que las ganancias diarias de peso fueron cercanas a los 800 gr/cab./día en ambos ensayos, duplicando a los sorgos tradicionales.

 

La producción de carne obtenida fue de 351 y 248,6 kg/ha., respectivamente. Mientras que las eficiencias de conversión fueron 12,44 y 12,98 kg de MS de alimentos/kg de carne producida, respectivamente.

En el Cuadro Nº 4 se muestra una síntesis de los resultados económicos de los dos años de ensayo.

Los costos de producción fueron consistentes con otros trabajos realizados en sistemas de engorde pastoril, donde el forraje fresco fue integrante exclusivo en la dieta (Fernández Mayer y Delgado 2009 y Oliverio 2010).

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