Rubén Paesani es el titular de la Cabaña 30 de octubre, de Ameghino, Buenos Aires, y del Semillero San Pedro. Dedicado a las semillas de toda la vida, hace poco tiempo decidió diversificarse y así alquiló un campo y se inició con la ganadería de carne y terminó con un plantel de vacas Angus de pedigree y compitiendo en certámenes ganaderos.
“Un poco fue para no tener todos los huevos en la misma canasta, y otro poco por salud mental, para tener otra ocupación que me distraiga de los problemas cotidianos del clima, la gente, las plagas, y mil cosas más que complican en el negocio de las semillas”, dice Rubén.
Y continúa explicando: “Además es muy bueno ver que cuando hay un problema con una producción, otra te ayuda. Por ejemplo, este año con la terrible seca, cada hectárea de cultivo para semilla rindió menos de la mitad de un año normal, pero allí estaba el rodeo ganadero que te permite echar mano y hacer caja mientras te recuperás”