Alimentos y alimentación

Suplementos dietarios

LIC. JOSEFINA MARCENARO

Licenciada en Nutrición

jmarcenaro@hotmail.com



Desde hace más de una década, el perfil de los suplementos dietarios fue modificándose. Inicialmente eran sobre todo productos a base de vitaminas, minerales, proteínas, fibra, etc. En la actualidad, debido a los avances del conocimiento en el campo de la nutrición y en respuesta a las demandas de los consumidores, la oferta de productos a base de hierbas y otros nuevos nutrientes se encuentra en aumento.

¿Que son los suplementos dietarios?
En el año 2012, el Instituto Nacional de Alimentos (INAL) dependiente de la ANMAT, realizó un relevamiento en farmacias y dietéticas del país, que permitió evidenciar que el 33 % de los suplementos dietarios ofrecidos contenían hierbas como ingrediente principal. El porcentaje restante de los suplementos dietarios relevados incluyó los destinados a deportistas, los de aceite de pescado y, por último, aquellos a base de vitaminas y minerales.

En la Argentina, los suplementos dietarios se encuentran incorporados al Código Alimentario Argentino (CAA) desde el año 1998. En el artículo 1381, son definidos como “productos destinados a incrementar la ingesta dietaria habitual, suplementando la incorporación de nutrientes en la dieta de las personas sanas que, no encontrándose en condiciones patológicas, presenten necesidades básicas dietarias no satisfechas o mayores a las habituales. Siendo su administración por vía oral, deben presentarse en formas sólidas (comprimidos, cápsulas, granulado, polvos u otras) o líquidas (gotas, solución, u otras), u otras formas para absorción gastrointestinal, contenidas en envases que garanticen la calidad y estabilidad de los productos”. En cuanto a su composición, deben aportar nutrientes, como proteínas, vitaminas, minerales, lípidos, carbohidratos, fibras, aunque también permite el uso de algunas hierbas, inicialmente sólo las incluidas en el C.A.A.

¿Cuándo son necesarios?
Debe quedar claro que, en condiciones normales, la dieta debe proveer todos los necesarios para el mantenimiento de las funciones del organismo. Por lo tanto, un suplemento dietario sólo debería consumirse cuando, por un estado fisiológico particular, el individuo necesite un suministro extra de un nutriente determinado, previa consulta al médico.

No debe ser consumido “por moda” ni con la esperanza de mitigar alguna dolencia, y en este sentido la publicidad tiene una trascendencia importante debido a que, por intermedio de ella, el consumidor recibe información sobre el producto y los beneficios que acompañan su consumo.

Para entender si son útiles o no, hay que tener claro el concepto de “factor limitante”. Es decir lo que falta para que algo funcione. Cuando tenemos un proceso complicado como es el metabolismo, en el que intervienen muchos elementos, cada uno de los cuales se regula de una manera, el que marca el ritmo global es el que peor funciona. Mejorarás sólo si se consigue una mejorara en ese factor limitante.

 Para tener en cuenta…

¿Los suplementos dietarios, son necesarios?

  • Muchas veces sí pero con previa indicación médica.

¿Son para todos?

  • No.

¿Siempre hacen bien?

  • No, porque si yo tomo un complejo vitamínico que no necesito estoy solamente encareciendo mi orina y gastando mis riñones en algo innecesario.

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