Consumo de Agua y Energía en Sistemas de Ordeño Robótico
Ing Agr Pedro Mazziotti
Gerente de Sistemas Automáticas de Ordeño DeLaval Argentina
La implementación de robots de ordeño en Argentina viene creciendo a pasos agigantados en los últimos años en nuestro país y en Latinoamérica.
Hoy en día hay más de 14 robots de ordeño en funcionamiento en Argentina y más de 50 por instalarse, en distintos tipos de sistemas, pero ¿Cuánta agua y energía consume esta tecnología?
Consumo de agua
El consumo de agua en un robot de ordeño va a depender de diferentes factores, muchos de los cuales se pueden ajustar mediante configuraciones propias del equipo.
1. Número de lavados diarios
El robot se lava de manera automática tres veces por día, idealmente. Realiza dos lavados alcalinos y uno ácido, cada uno de estos dura aproximadamente 25 minutos. El consumo de agua para estos lavados, va a depender entre otras cosas de la distancia que exista desde el robot hasta la sala de máquinas. Lógicamente a más distancia, son más los metros de línea de leche que hay que limpiar y por ende se necesita mayor cantidad de agua.
A su vez, el robot tiene la capacidad de separar leche detectada como anormal de manera automática, por ejemplo, la leche de vacas en tratamiento, con alto índice de detección de mastitis o con calostro será separada y luego de esta acción el robot realizará un enguaje corto. Si aumenta el número de vacas cuya leche sea separada, se tendrán más de este tipo de lavados.
2. Configuraciones del equipo
Cada vez que una vaca entra al robot, los pezones se lavan con agua, mediante el uso de una copa exclusiva para este fin. Este lavado puede consumir más o menos cantidad de agua y realizarse una o dos veces, esto dependerá principalmente de cuán limpias lleguen las vacas al robot y eso dependerá de la limpieza en las áreas donde viven las vacas y los accesos al área de ordeño.
A su vez una vez que la vaca sale de la estación, se realiza un lavado del piso, el cual también es configurable en frecuencia y duración, también esto se verá afectado por la limpieza.
3. Utilización del sistema
Como se mencionó en el punto anterior, hay dos acciones que consumen agua que se realizan cada vez que una vaca ingresa a la estación de ordeño. Por ende, a mayor utilización del sistema aumentará el consumo, lógicamente una mayor utilización de la estación aumenta la eficiencia del sistema y se tendrán más ordeños por día.
CUADRO 1: Consumo de agua en ordeñe robótico VMS
Una utilización ideal de la estación sería la siguiente: entre el 85 – 90% del tiempo del día en ordeño, un 5-8% en lavado y el resto del tiempo que esté libre.
A continuación, se detallan los consumos aproximados, considerando 160 ordeños, 3 lavados completos, 5 lavados extra por día, limpieza media de pezones y lavado del piso del robot luego de cada vaca
Consumo de Energía
El consumo de energía en un robot está afectado por los mismos factores mencionados anteriormente a los también cuales se les suman:
1 Enfriamiento controlado por flujo
En un sistema robótico, la cantidad de leche que va ingresando al tanque de frío es diferente a la de un tambo convencional, donde en un período acotado de tiempo ingresa todo el volumen del ordeño en curso.
En un sistema robótico, al tratarse de una entrada continua de leche durante las 24 horas del día, las potencias de las unidades de refrigeración son mucho menores que las de un establecimiento convencional de ordeño; de ésta manera, el tanque de frío es controlado por la cantidad de leche y temperatura en su interior.
2 Uso de Intercambiador a placas y recuperador de calor
El consumo de energía puede minimizarse mediante el uso de diferentes estrategias, generando una producción sustentable de leche.
Una opción es la implementación de intercambiadores de calor a placas, produciendo una caída sustancial en la temperatura de entrada de leche al tanque, requiriendo una menor cantidad de energía eléctrica para enfriar el total de la masa almacenada. La utilización de ésta tecnología es siempre recomendable para cualquier tipo de sistema, debido al ahorro sustancial en el consumo eléctrico, impactando directamente en la rentabilidad del ejercicio.
Así también, el uso de recuperadores de calor ayudará a reutilizar la energía extraída de la leche para generar agua caliente. De esta manera, se produce un ahorro extra en el consumo eléctrico y se alivia la utilización de los condensadores de las unidades de refrigeración durante el verano, cuando la temperatura ambiente tiene un importante impacto en la performance del sistema frigorífico.
En términos generales el consumo es de entre 18-25kWh por cada 1000 litros de leche producida.
Un punto muy importante en cuanto a la energía, es contar con grupo electrógeno con arranque automático. Estos sistemas funcionan 24 x 7, ante cualquier corte de energía, es necesario que se restablezca de manera automática. En el mismo sentido, es necesario contar con las protecciones necesarias para estabilizar la corriente.
En cuanto a la necesidad de potencia, tomando un ejemplo de 130 vacas en ordeñe, con 2 robots, considerando únicamente lo necesario para ordeñar, se necesitarían unos 28 kva.