Cómo utilizar los forrajes conservados en la producción de leche

Ing. Agr. Rodolfo Berca,

asesor privado

A fines de mayo habíamos hablado con el Ing Berca acerca de la publicación de esta nota. Unos días después nos enteramos de su fallecimiento, vaya entonces la misma como un homenaje a su autor.

Cómo utilizar los forrajes conservados en la producción de leche

Siempre se considera que el primer paso para lograr una alta producción ganadera, tanto en carnes como en leche, pasa por la capacidad del productor para generar la mayor cantidad y calidad de forraje posible. Con el uso apropiado de las tecnologías disponibles, el productor debe convertirse en un buen productor de pasto. Sobre esa base, los forrajes conservados son una estrategia para producir alimento para el ganado a partir de cultivos agrícolas o pasturas que se cosechan, se conservan y luego son destinados a la producción ganadera.

Roles del forraje conservado en la producción:

  • Suplementos en otoño-invierno complementando al pastoreo cuando las praderas disminuyen su productividad.
  • Ajuste de la carga animal, ya que permite un aumento del número de cabezas en igual superficie. En condiciones climáticas adversas (sequía, inundaciones) mantienen la carga animal preexistente.
  • Balance y equilibrio de las dietas durante todo el año, ya que las pasturas en otoño-invierno contienen elevados niveles de agua y compuestos nitrogenados no proteicos. Además, son pobres en carbohidratos (fibrosos y no fibrosos). En primavera si bien tienen un buen contenido de azucares, la fibra no tiene buena efectividad y los niveles de proteínas degradables en rumen son muy altos. En verano, normalmente la planta madura con rapidez, se lignifica mucho y pierde digestibilidad en forma abrupta.

El heno

El rol del heno en la dieta es que se trata de una fuente primaria de fibra efectiva, que contribuye a estabilizar las fermentaciones ruminales, sobre todo cuando se suministra alta cantidad de concentrados o se pastorean pasturas y/o verdeos muy tiernos y acuosos. Los henos de leguminosas pueden ser alimentos proteicos si conservan muchas hojas sanas y los tallos son tiernos.

Las ventajas de usar heno son varias:

  • En dietas muy húmedas o con mucho grano normalizan la función digestiva evitando la acidosis ruminal y las deposiciones muy liquidas.
  • Aumentan la materia seca de la ración.
  • Son ingredientes indispensables en sistemas de alimentación con suero o permeado de suero líquidos.

Las desventajas también existen:

  • La calidad de los henos es muy variable, entre y dentro de las distintas especies forrajeras.
  • El suministro en portarrollos es de difícil control y muchos animales no pueden comer el heno por el espacio o de competencia entre vacas.
  • Los desperdicios son muy altos (más del 20 % de la materia seca ofrecida).
  • Como único o principal ingrediente de las raciones de vacas secas pueden desequilibrar el balance aniónico-catiónico, por su elevada concentración en potasio.

En rodeos de 20-22 lt/VO/día promedio anual, el heno debería representar el 10 al 20% de la dieta. En vacas secas y vaquillonas puede ser del 70-80% de la materia seca total.

El suministro de rollo puede ser con portarrollos, calculando un rollo cada 18-20 vacas o en caso de restringir a unas horas dar un rollo cada 10-12 vacas.

En el caso que el rollo se procese (muela) se puede suministrar con exactitud lo que el animal requiere y además, produce menos pérdidas. En este caso el picado de rollos de leguminosas no debe ser menor a 10 cm para evitar la pulverización de las hojas.

Silajes de maíz y sorgo

El rol en la dieta es que proveen fibra química y fibra efectiva. Cuando el cultivo contiene más del 35% de la materia seca en grano, se considera energético.

Las ventajas de usar silajes también resultan diversas:

  • Son recursos para complementar el pastoreo durante el año.
  • Equilibran las dietas, amortiguando los excesos de amoníaco que se producen cuando se degradan las proteínas de las pasturas.
  • Suministran fibra cuando la pastura es aguachenta y tierna.
  • Durante la primavera, minimizan el empaste durante el pastoreo.
  • En verano pueden servir de vehículo para suplementar bajo la sombra con algunos concentrados.
  • En vacas cerca al parto ayudan a mejorar el balance energético y anion-cation.
  • Cumplen un rol esencial para el aumento de la carga animal.

Las desventajas que se pueden encontrar:

  • Son pobres en proteínas, calcio y fósforo.
  • Son muy palatables y pueden producir disturbios ruminales (acidosis).
  • Si el picado es muy fino (menos de 0,8 cm) no es buena fuente de fibra efectiva.

Los niveles en las raciones durante el otoño-invierno para vacas lecheras de 17-27 lt/vaca x día son de hasta 8-9 kg de materia seca/VO/día. En primavera-verano no superar los 4-6 kg de materia seca/VO/día. Para vacas en transición se puede suministrar hasta el 0,8-0,9% del peso vivo del animal.

Para animales más jóvenes empezar a suministrar a partir de los 150-180 kg de peso vivo. Para suministrarlos hay que cumplir con dos reglas básicas que son sitios de alimentación y comederos secos y limpios y acceso al silaje dando un espacio de 0,70 m lineales/vaca.

Silajes de praderas, alfalfa

Su rol en la dieta es que son fuentes de fibra y de proteínas brutas. Contienen escasos niveles de carbohidratos y azúcares fermentables y son pobres en energía, aunque pueden ser fuentes de lípidos. Son recursos para suplementar forrajes de bajos niveles de proteínas, para sustituir a las pasturas ante condiciones climáticas adversas para el pastoreo o para suministrar en verano.

Las ventajas son:

  • Se puede aprovechar el excedente de forraje de la primavera para ensilar a muy bajo costo.
  • Si las partículas tienen más de 2 cm de largo representa una excelente fuente de fibra efectiva.
  • Hay que practicar un preoreo para llegar al 40-45 % de materia seca.
  • Poseen bajos niveles de azucares y carbohidratos, lo que hace complicado la fermentación láctica.
  • Se debe hacer una inoculación durante la realización del silaje (ácido propiónico).

El suministro no debe ser elevado en las raciones. Si no se dispone de concentrados energéticos no superar el 18-20% de materia seca total. Si la base es silo de maíz con buenas mazorcas se puede dar un 30-40% de la materia seca total.

Empezar el suministro en forma paulatina para acostumbrar al rumen. Previenen el problema de patas o la cetosis en vacas en transición.

Para el suministro con silo de maíz o sorgo usarlo mezclándolo en el mixer para lograr uniformidad.

  • Los forrajes conservados cumplen diversas funciones de gran valor en los tambos y producción de carne.
  • Planificar su uso es clave para el mejor resultado productivo y económico.
  • Asesorarse adecuadamente es fundamental para lograr mayores beneficios.

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