ExpoSuipacha 2019
Beneficio económico de generar condiciones de bienestar animal
En el marco de ExpoSuipacha 2019, Mastellone Hnos. La Serenísima, realizó, junto con DeLaval, un “Taller de Bienestar animal en el tambo”. El mismo fue abierto al público, y se desarrolló en el marco de su Plan Más Leche, con el aporte técnico de Producir XXI como parte del Programa Mejoras con Seguimiento.
El primer disertante fue el Ing. Agr. Lucio Carbone, Responsable de Bienestar Animal en DeLaval. El especialista aseguró que “la observación y la experiencia mostraron que las vacas que viven en ambientes confortables producen más leche y viven vidas más largas y saludables. Un animal no puede explicarnos lo que le provoca bienestar, pero podemos observarlo y medir su actividad y comportamiento, y compararlo con el de un animal a gusto y saludable”.
A continuación, sostuvo que los animales deben contar con agua y alimento de calidad, aire fresco, superficies suaves y limpias de descanso. Deben comportarse naturalmente, poder pararse y recostarse con facilidad. ¿Es eso lo que está ocurriendo en nuestros establecimientos?, preguntó. Los casos de mastitis, inflamaciones de patas, estrés térmico, etc. pueden indicar deficiencias en las condiciones de bienestar animal.
Para que un rodeo o animal se encuentre en situación de confort se deben cumplir, según el “Consejo de Bienestar animal de los animales de granja” del Reino Unido, con estas 5 libertades:
1. Libertad de enfermedades, sanidad adecuada.
2. Libertad de hambre, una nutrición adecuada.
3. Libertad de dolor, miedo y estrés.
4. Libertad de estrés térmico o físico.
5. Libertad de demostrar un comportamiento natural.
El bienestar animal no es un producto o una herramienta, es lo que está sucediendo en el establecimiento las 24 horas del día, los 7 días de la semana.
Beneficio económico
Al referirse al beneficio económico que se obtiene al brindar condiciones de bienestar, Carbone mostró algunos ejemplos. Así, evaluó la inversión en un sistema de refrescado directo para un tambo de 250 vacas en ordeño, que tiene una producción individual de 27 litros por día, recibe U$S 0,27 por litro de leche y que tiene 150 días al año con condiciones de estrés calórico.
Considerando que, como resultado del refrescado directo, la eficiencia de conversión del alimento en leche mejora un 5%, se obtendría un ingreso adicional de 7.239 dólares. A este efecto se suma que la producción de leche no cae durante los días de estrés calórico, lo que equivale a U$S 21.870 adicionales, que, de no tener este sistema, se perderían.
Por el lado de los costos, debe considerarse un mayor costo de alimentación respecto de un tambo sin refrescado, ya que, al producir más litros, las vacas refrescadas, tienen un mayor consumo de materia seca. Este extra sería de U$S 6.750 anuales. Otro de los costos que debe tenerse en cuenta es el consumo eléctrico, que para este caso sería de U$S 1.944 al año. Y, por último, el monto de la inversión, que para este caso sería de U$S 13.650.
Considerando los ingresos extra y también los costos, de este análisis se desprende que un tambo de 250 VO y 27 lts/VO/día, recuperaría la inversión del sistema de refrescado directo en un plazo menor a 1 año.
Los robots llegaron para quedarse
A continuación, el Ing. Agr. Mazziotti, expuso sobre las características del ordeñe robótico. Al comenzar, señaló que el proceso de ordeño se adapta muy bien a la tecnología robótica, ya que se trata de un proceso repetitivo, donde el robot encuentra los pezones, los limpia, si la leche es anormal la separa, luego se coloca la unidad de ordeño y por último se hace una desinfección. Muchos tambos ya cuentan con algún grado de automatización en el proceso de ordeño, como por ejemplo los retiradores automáticos de unidades de ordeño o brazos robotizados para aplicación de desinfectantes de pezones.
Pero, ¿cuáles son las principales razones por las cuales los productores eligen un sistema de ordeño robótico? Veamos algunas:
ü Flexibilidad para el trabajo y mejoramiento en calidad y estilo de vida de todo el grupo familiar.
ü Les gustan las vacas, pero ya no disfrutan del monótono trabajo de ordeño.
ü Se puede dedicar más tiempo a otras actividades que generan más valor, como el manejo de la alimentación o la reproducción.
ü Desean tener la última tecnología disponible.
ü Tener en claro un plan de sucesión y la continuación en la actividad.
La clave para el éxito de estos sistemas es lograr que las vacas se muevan solas hacia la estación de ordeño. La principal motivación que tienen es el alimento, por lo tanto, cada vez que la vaca va a la estación de ordeño, recibe una cantidad de concentrado que el robot le dispensa en base a sus días en ordeño, su nivel de producción etc.
El proceso de ordeñe se adapta perfectamente a la tecnología robótica. Hay que tener una mirada global del sistema en cuanto al diseño y manejo, para maximizar los resultados y la performance del robot, haciendo foco principalmente en el gerenciamiento de la información, manejo de las vacas y la alimentación.
“Este tipo de sistemas proponen un cambio en el paradigma de la producción lechera del siglo XXI y hacia allá vamos”, indicó Mazziotti.