Producir XXI, noviembre 2023
Componentes líquidos en la dieta, conceptos innovadores y muy útiles
Ing. Arturo Bressanello,
Equipo técnico de NutriLiq
arturobressanello@alz-agro.com.ar
+54 9 223 524-6086
En alimentación animal, incorporar alimentos líquidos con alta MS genera un fuerte impacto productivo y económico gracias a ciertos atributos muy prácticos e interesantes.
Cuando un productor o un asesor enfrentan la situación de formular una ración, tanto sea para un tambo, para un feedlot, o diseñar una suplementación a campo, comúnmente en su “radar”, solamente aparecen alimentos sólidos y húmedos. Lo primero que se piensa, son cosas secas y húmedas. No se piensa en la posibilidad de componentes líquidos de la dieta… salvo el agua, que ya sabemos que es fundamental.
Entendemos por solidos un grano, un pellet, un alimento balanceado. Entendemos por húmedos, un forraje como verdeos, alfalfa o PPy también un subproducto de industrias, burlanda por ejemplo, silajes, bagazo de cerveza, gluten feed, diferentes opciones denominadas: húmedas.
Pero existen también los componentes líquidos
Cuando analizamos la incorporación de un nutriente o un alimento líquido, comenzamos a ver que su lógica de funcionamiento es un poco diferente, y de la manera de interactuar con los otros elementos de la dieta, sólidos y húmedos, son distintos.
Atributos primarios y secundarios de los alimentos
Cada ingrediente que se incorpora en la dieta tiene un rol en lo que hace o definen sus atributos. Fundamentalmente podemos dividir en los que se denominan “atributos primarios”, en los cual los programas de formulación son los principales fiscales sobre la validez o no de incorporación y su impacto en la dieta general. Son, fundamentalmente, su nivel de materia seca, el nivel de proteína que aporta, el nivel de energía y el nivel de minerales. Esos atributos primarios, son los más gruesos y los más importantes a considerar en lo que es el costo y armonía de una ración.
Pero otra manera de mirar el efecto de un elemento que se incorpora en la ración, son los “atributos secundarios”. Son los impactos que generan en el total de la mezcla, y que hacen por la mezcla, donde ahí sí, los programas de formulación no tienen la capacidad de interpretar. Muchas veces, los atributos secundarios, tienen mucha más importancia que un punto, o un punto y medio de proteína, o 3 o 4 megacalorías más o menos.
El mayor o menor impacto está vinculado a una dieta bien mezclada, que evite selección, que quede todo pegadito y que no se estratifique.
Mirar la dieta de forma integral
En un mundo donde el mixer es un protagonista, tipo tambo o feetlot, ante la incorporación del maíz, rápidamente uno pregunta y describe su característica: aporte de energía, algo de proteína, algo de extracto etéreo. Ese es su aporte para la ración. Pero, la pregunta que viene a diferenciar los líquidos es ¿qué hace por la ración en sí? ¿Qué hace por el TMR? ¿Qué aporta en función de los otros socios que ingresan en esa dieta?
Si analizamos un pellet de girasol, analizaremos que su protagonismo esencial es el aporte de proteína, muy poca energía, el mayor o menor nivel de fibra dependerá si es un pellet integral o no. Pero, volvamos también a la pregunta inicial ¿qué hace en la interacción con los otros elementos de la dieta?
En cambio, los atributos secundarios de los alimentos líquidos son notables pero los programas de formulación no pueden calcularlos. Un ejemplo de ellos es que las dietas liquidas metidas en un mixer a través de una ducha, son extremadamente simples de aplicar (ver foto junto al título de esta nota). Además, actúa en la homogeneización física de la mezcla, su participación ayuda a unir a los diferentes elementos, evitando estratificación. Ayuda a evitar la selección porque homogeneiza desde el punto de vista de olor y de sabor. En toda la mezcla, el animal no va a encontrar diferencia entre una fibra barnizada y pintada con el producto líquido vs un grano que tiene el mismo olor y está barnizado y pintado también con el líquido.
Incrementar el consumo es clave
Por otra parte, incorporar un componente líquido con alta MS al TMR ayuda a que la mezcla sea más húmeda, pero es más húmeda sin sacrificar materia seca. La tasa de consumo de una dieta, está muy vinculada con su contenido de humedad. Dietas muy secas y con mucho polvo, dificultan una ingesta fácil. La clave está en elegir alimentos líquidos con alto contenido de MS, 70-75% o más.
Azúcares simples reemplazan parte del almidón
Un tema muy importante a destacar es que, en estos alimentos líquidos, su fuente de energía no es el almidón, son los azucares simples. El impacto que tienen los azucares simples dentro de una dieta, reemplazando parte del almidón, es muy grande, genera unos efectos productivos y económicos muy favorables. Será tema de otras notas.