Debido a que la circulación polar será potenciada por el desarrollo del evento frío, la primavera presentará un panorama muy des uniforme. La mayor parte del Cono Sur observará precipitaciones normales a superiores a lo normal, pero se destacarán algunos focos secos uno se ubicará sobre el centro de la Región Pampeana, con su foco en el límite común entre Córdoba, Santa Fe, La Pampa y Buenos Aires, y zonas aledañas.
Con la llegada del verano los vientos polares se retirarán hacia el Sur, disminuyendo sus efectos negativos, pero el episodio frío alcanzará su mayor desarrollo, convirtiéndose en un “Neutral Frío” o una “La Niña Débil”. La Región del Chaco, el Noroeste de la Región Pampeana, el este de Buenos Aires y la mayor parte del Uruguay recibirán precipitaciones normales a superiores a lo normal. Contrariamente, gran parte del interior de Argentina, recibirá aportes bajo la media, con su foco en el límite común entre Córdoba, Santa Fe, La Pampa y Buenos Aires, y zonas aledañas.
Al comenzar el otoño 2025, retornarán los vientos polares. Aunque gran parte del Cono Sur continuará observando precipitaciones normales a superiores a lo normal, se acentuará el foco seco en el límite común entre Córdoba, Santa Fe, La Pampa y Buenos Aires, y zonas aledañas.
Por el momento, no se percibe el riesgo de heladas tempranas otoñales, pero es temprano para poder afirmarlo.
Lo expuesto hace evidente que los planteos productivos para la Campaña Agrícola 2024/2025 deben hacerse con mucho realismo y prudencia.