2.- El sodio que vemos y el que no vemos
El sodio que vemos es aquel que por costumbre, gusto o hábito agregamos a las preparaciones, cuando agregamos sal de mesa. En cambio, el invisible, es el que se encuentra en los alimentos de forma natural. Y aquí es donde se debe hacer la aclaración. El sodio se incorpora a la dieta como invisible en el que trae agregado a las preparaciones como galletitas, pastas cerradas al vacío, etc. (alimentos ultraprocesados).
3.- Aprendamos a entender las etiquetas. Leer la información nutricional.
El %VD es el porcentaje de la ingesta diaria recomendada que se cubre en una porción. El valor diario para el sodio es de menos de 2.400 mg por día.
Como regla general, un alimento con 5% o menos del VD por porción, se considera bajo en sodio. Como así un alimento con 20% o más del VD por porción, se considera alto en sodio.
De acuerdo al Código Alimentario Argentino (CAA), un alimento se considera bajo en sodio si contiene hasta 120 miligramos de sodio por cada 100 gramos.
Además, los alimentos pueden clasificarse según su contenido de sodio de la siguiente manera:
- Muy bajo: Si tiene un máximo de 40 miligramos de sodio por cada 100 gramos
- No contiene: Si tiene un máximo de 5 miligramos de sodio por cada 100 gramos
En el caso de que un alimento no cumpla con la condición de «no contiene sodio», debe indicarse en el rótulo la frase «contiene sodio propio de los ingredientes». Por último, para ser llamado “reducido en sodio” (o liviano; light) tiene que tener como mínimo una reducción del 25% del sodio con respecto al producto de referencia.