Las altas temperaturas pueden tener efectos negativos sobre la fisiología, la salud, el comportamiento y el estado mental de los animales, lo cual afecta negativamente su bienestar.
Como consecuencia del estrés calórico, disminuye la fertilidad, la producción y el rendimiento de los rodeos, mientras aumenta el riesgo de muerte por golpe de calor. Es por eso que cada día de estrés calórico representa un día de pérdida para los productores.
Recomendaciones para prevenir el estrés:
•Provea sombra suficiente en corral de espera, ordeñe y zona de alimentación: se recomienda el uso de malla plástica de mediasombra con 80% de densidad, orientada de norte a sur, con una superficie cubierta de cuatro metros cuadrados por animal. Todos los animales deben tener acceso libre a la sombra.
•Proporcione ventilación adecuada en sala de ordeñe.
•Asegure abundante agua fresca, cerca del ganado. Considere que una vaca puede consumir en promedio hasta 107 litros por día, mientras que una lechera de alta producción puede ingerir hasta 140 litros por día. Las fuentes de agua deben estar ubicadas en lugares estratégicos de acceso fácil y rápido.
•Ofrezca dietas de baja actividad fermentativa: priorice los pastoreos nocturnos y de madrugada y suministre dietas “frías” (aquellas que por su composición minimizan la generación de calor metabólico manteniendo la oferta de nutrientes).
•Minimice el tiempo de espera en corrales: planifique todas las tareas y prepare los materiales necesarios para minimizar el tiempo de los animales en mangas y corrales.
•Utilice ventiladores y aspersores en patios de espera, área de comenderos y túneles de enfriado: se recomienda combinar períodos cortos de mojado intensivo con momentos prolongados de ventilación. El tamaño de gota durante la aspersión debe ser lo suficientemente grande como para mojar el animal.
•Evite manejos estresantes durante las horas calurosas: cuando esto no sea posible, realice los arreos de manera tranquila, respetando el paso de los animales. Los encierres y trabajos en manga deben realizarse a primera hora de la mañana o a última hora de la tarde-noche. Brinde agua y alguna fuente de alimento en los corrales donde permanecerán los animales. Consulte el pronóstico del tiempo antes de programar los manejos de la hacienda.
•Permanezca atento al comportamiento de los animales para identificar síntomas de estrés calórico de manera temprana.